Renovar con barniz las puertas de la casa puede parecer algo muy tedioso y complicado: pero en realidad no lo es y en este artículo vamos a contarte cómo hacer este trabajo tú mismo de manera sencilla y práctica, para que las puertas de tu hogar luzcan como nuevas y con ese nuevo estilo que estás buscando.
Sólo tendrás que seguir el paso a paso que vamos a presentarte a continuación y darle ese toque personal para distinguir la puerta de madera que estás pensando en barnizar. ¿Imaginas tener la puerta de madera renovada y combinando sus matices con la nueva decoración que estás planificando para tu hogar? Esto es posible a partir de este nuevo barnizado.
Por eso toma nota de las herramientas, productos, elementos adecuados y los trucos clave que te detallaremos a continuación para poder actualizar tu puerta de madera y no olvides de seguir cada paso para lograr tu objetivo y conseguir una llamativa terminación con el barnizado. ¿Estás listo? Entonces manos a la obra.
Cómo barnizar bien una puerta de madera
Barnizar bien una puerta de madera es un trabajo que puede llevar algo más de tiempo que realizar el barnizado de los muebles, por ejemplo. Pero teniendo los materiales adecuados y haciendo los pasos correctos el trabajo puede hacerse rápido y quedar muy bien. Recuerda, hacer el barnizado de la puerta de madera puede ser el primer gran paso para un cambio en la decoración del hogar.
Sin dudas, el proceso será gratificante una vez que veas el resultado: un acabado bien realizado realzará la puerta de madera haciendo que parezca como nueva y así podrás sorprender a tu familia y a las visitas que recibas en la casa.
1. Prepara la puerta
Para poder hacer un trabajo bien realizado, antes de iniciarlo es importante eliminar los rastros de polvo que pueda tener la superficie de la puerta. Esto es clave en el inicio porque cualquier pelusa o suciedad adherida puede terminar pegada a la puerta después de ser barnizada o peor aún, caer dentro del barniz y arruinar el acabado buscado.
Puede seguir estos pasos para lograr una preparación correcta:
- Sacar la puerta. Quitar la puerta de las bisagras y dejarla afirmada y parada en un área de trabajo de la casa bien ventilada para evitar que el olor a barniz invada el lugar.
- Limpiar. Repasar toda la superficie de la puerta con un trapo seco y luego uno húmedo para eliminar el polvo, toda la suciedad y cualquier residuo de barniz o pintura anterior.
- Lijar la puerta. De forma suave pasar una lija fina en toda la superficie de la puerta para lograr una terminación uniforme y así eliminar las imperfecciones que pueda tener la madera. Puedes usar guantes y algún elemento de protección en los ojos y hasta mascarilla y así evitar complicaciones con la salud.
2. Elige el barniz adecuado
Como siguiente paso hay que elegir el barniz adecuado. Para esto se debe tener en cuenta las características de la puerta de madera y algunas consideraciones.
Entre esas consideraciones, se cuentan los factores como la apariencia deseada para la puerta, si se buscará una protección contra la humedad y los rayos UV en caso de que la puerta de madera esté expuesta al exterior y también la durabilidad del trabajo hecho con barniz.
Ten en cuenta que en el mercado hay distintos tipos de barnices disponibles para puertas de madera, como los barnices al agua, al aceite y los barnices con tinte. Si tienes dudas al momento de la elección también puedes consultar directamente con el vendedor que también puede darte las mejores opciones.
3. Aplica el barniz
Luego de preparar la puerta y seleccionar el barniz, es momento de aplicar el producto para poder comenzar con el trabajo de restauración de la puerta de madera. Sigue los siguientes pasos para hacerlo correctamente:
- Cubre el piso de salpicaduras. Antes de empezar a aplicar el barniz elegido, es ideal proteger el área circundante al trabajo a realizar para evitar posibles salpicaduras o manchas en el piso -por ejemplo- para no tener que lamentar complicaciones una vez terminado el barnizado.
- Utilizar una brocha. Para realizar la aplicación del barniz, hay que hacerlo utilizando un brocha destinada a este producto, la cual se puede conseguir también en el mercado de distintas medidas y tipo de cerdas. O también se puede optar por un aplicador de espuma lo que permite hacer una aplicación más cuidada y en detalle.
- Barnizar en la dirección de las vetas. Es importante lograr una capa fina y pareja de barniz en toda la puerta en general. Para hacerlo de manera correcta, la aplicación del barniz se debe hacer en la dirección de la veta de la madera.
- Dejar secar. Es importante que se deje secar el barniz antes de darle capas adicionales. Es ideal seguir las instrucciones del fabricante del barniz para conseguir el mejor resultado.
4. Lijado y capas adicionales de barniz
Luego de aplicar la primera capa del barniz como se indicó anteriormente y haber dejado secar, entonces sí es posible volver a barnizar la puerta de madera.
Para avanzar con este trabajo, hay que lijar ligeramente la superficie con un papel lija fino y así eliminar las imperfecciones que puedan haber quedado.
Luego de esto, darle a la puerta de madera las nuevas capas de barniz tanto como sea necesario y se obtenga el nivel de brillo buscado y la protección deseada.
5. Deja secar
Entonces llega el momento de dejar secar definitivamente el barnizado de la puerta de madera. Esto es una vez que se hayan aplicado todas las capas de barniz necesarias y el resultado deseado está confirmado según lo planteado.
Colocar la puerta nuevamente en las bisagras una vez que esté completamente seca para evitar arruinar el barniz con los movimientos. Como siempre, es importante asegurarse de seguir las instrucciones del fabricante para cumplir exactamente con el tiempo de secado.
Con todo, la puerta ha quedado totalmente renovada, con el barniz nuevo reluciendo y realzando los ambientes de tu hogar.
