Anota las mejores recetas de pan sin horno para el verano y con las que triunfarás, sí o sí, con tus invitados. ¡A amasar se ha dicho!
En el último año, hacer el propio pan en casa parece algo habitual. No solo es entretenido sino que nos permite disfrutar de panes caseros mucho más ricos que los que se venden en la mayoría de supermercados.
Pero con los calores de estos días, lo que menos apetece es encender el horno, por mucho que añores tu perfecto pan.
La buena noticia es que también se pueden hacer en casa panes sin horno, usando como fuente de calor para cocinarlos una plancha caliente o una sartén.
Cinco panes sin horno que son geniales para el verano
Una sartén o plancha que no se peguen es lo único que necesitas para hacer estos panes que te van a solucionar más de una merienda o cena.
Pan de pita
Perfectos para preparar kebabs caseros, aunque también dan juego para preparar sándwiches y hamburguesas.
Se pueden hacer con harina blanca normal, integral o mezclando las dos. Si aún no los has probado pincha aquí para ver la receta del pan de pita en sartén.
Ingredientes
- Harina de trigo integral, 300 g
- Harina de trigo de uso común, 150 g
- Sal, 1 cucharadita
- Levadura fresca de panadería, 25 g
- Impulsor químico tipo Royal, 1 cucharadita
- Aceite de oliva virgen extra, 30 ml
- Agua templada, 100 ml
Elaboración
En un cuenco mezclamos las harinas con la sal y el impulsor químico. Añadimos la levadura fresca desmenuzada, el agua y el aceite. Mezclamos bien con ayuda de una cuchara hasta que se empiece a formar una masa.
Volcaremos la masa sobre una encimera enharinada para seguir amasando con las manos hasta obtener una masa lisa y elástica a la que daremos forma de bola.
La pasamos a un bol, la tapamos con papel film y la dejamos reposar 1 hora o el tiempo necesario para que duplique su volumen.
Dividimos la masa en 12 porciones dándoles forma de bola y después las aplastamos con las manos o con un rodillo. Dejamos reposar nuestros panes de pita durante media hora tapados con un paño antes de cocerlos.
Podemos hacerlo en una sartén a fuego medio y estarán listos en 3 minutos. Simplemente tendremos que ponerlos sobre la sartén caliente e ir dándoles las vuelta cada minuto hasta completar 3 minutos.
Tortillas de trigo caseras
Ingredientes
- 100 g de harina de trigo de todo uso
- 50 ml de agua templada
- 2 g de sal
Elaboración
Mezclamos la harina con la sal en un bol. Añadimos el agua y mezclamos con una cuchara hasta que se empiece a formar una masa.
Ahora pasamos la masa a la encimera y seguimos amasando bien con las manos hasta que tengamos una masa lisa. Dividimos la masa en porciones de 50 gramos y les damos forma de bolita.
Con la ayuda de un rodillo, estiramos cada bolita hasta formar una tortilla de 20 cm de diámetro. Para cocinar las tortillas, ponemos a calentar una sartén a fuego alto y, cuando haya cogido temperatura, lo bajamos un poco para que se mantenga el calor sin que se quemen las tortillas.
Ponemos una tortilla sobre la sartén caliente y cuando veamos que se empiezan a levantar los bordes le damos la vuelta. La dejamos hasta que veamos que la tortilla empieza a hincharse formando burbujas. Volvemos a darle la vuelta y la dejamos unos segundos para que se doren un poquito las burbujas.
Paratha hindú
Ingredientes
- Para los panes
- Harina de trigo, 330 g
- Leche, 160 g
- Sal, 7 g
- Mantequilla clarificada, 20 g
- Impulsor químico, 4 g
Elaboración
En un bol amplio, juntamos todos los ingredientes secos: harina, sal e impulsor. Seguimos añadiendo la mantequilla clarificada y la leche poco a poco mientras vamos removiendo, hasta que tengamos una masa algo pegajosa pero, a la vez, manejable.
Cuando tenga una textura homogénea tapamos con un paño húmedo y dejamos descansar 30 minutos.
La dividimos en unas 12 porciones del mismo tamaño a las que daremos forma de bola, que luego se convertirán en nuestras parathas. Las dejamos reposar en una encimera aceitada, siempre tapadas con el paño, durante 15 minutos.
Para darle forma a las parathas, engrasamos bien la encimera y, con la ayuda de un rodillo las vamos estirando hasta que queden muy muy finas.
La masa la plegamos por la mitad sobre sí misma, espolvoreamos con queso rallado y doblamos la masa haciendo pliegues de un dedo de grosor, doblando un pliegue sobre el siguiente hasta quedarnos con una tira de un centímetro de ancho. Enrollamos las tiras formando una espiral y dejamos reposar otros 10 minutos.
Pasado este último reposo, pasamos el rodillo sobre las espirales hasta tener un disco de masa de unos tres milímetros de espesor. Engrasamos una plancha con mantequilla clarificada y las cocinamos por ambos lados hasta que estén doradas.
