La miel natural no es solo una delicia, sino que trae diferentes propiedades que aportan beneficios a nuestro organismo. Tampoco es una nueva noticia, desde hace siglos se utiliza para mejorar afecciones, por ello, incorporarla a una dieta puede ser la mejor decisión.
Hoy traemos 10 beneficios de la miel, factores que aportan cosas positivas a tu salud y que no querrás dejar de probar. Además, no existe un solo tipo, y debes conocer a fondo esta exquisitez medicinal.
¿Qué es la miel?
La miel natural es un elemento dulce producido por las abejas a partir del néctar de las flores o de secreciones de plantas, como es el caso de la melaza. Es una sustancia viscosa y pegajosa, la cual varía en color, todo depende de la fuente usada por las abejas para producirla.
En cuanto a su composición, está se compone de agua y azúcares simples, pero también tiene otros componentes en pequeñas cantidades, tales como: carbohidratos, enzimas, minerales, vitaminas, antioxidantes y compuestos fenólicos. Pero todo varía, una vez más, dependiendo de la flor.
También es bueno recordar que la miel ha sido muy usada a lo largo de la historia, es de los ingredientes más importantes de la medicina natural. Esto no ha cambiado en la actualidad.
Tipos de miel
Ahora que entendimos qué es, es momento de conocer los tipos de miel que existen. Este milagro manjar puede venir en múltiples presentaciones y desde varias fuentes. Te diremos una lista de las más populares y que sirven para diversas afecciones, o como complemento a tus alimentos.
- Miel de tilo: Su color es bastante claro y es muy dulce
- Miel floral: Es una mezcla hecha con el polen de diferentes flores
- Miel de acacia: Es más recomendada para adultos
- Miel de alforfón: Es más oscura y picante
- Miel de salvia: Su tono es amarillo verdoso
- Miel de castaño: Es casi roja y de sabor intenso
- Miel espina de Jerusalén: Es un tipo de miel natural más compleja de obtener
- Miel de la montaña: Otra de las más buscadas, viene de los montes
- Miel de lavanda: Sabor fuerte y olor a lavanda
- Miel de espino blanco: De color oscuro y sabor picoso
- Miel de evodia: Tiene muchos nutrientes
- Miel de calluna: Tiene mucho azufre, pero un sabor delicioso
- Miel de amorfa: El color es rojizo, pero su sabor es ligero
- Miel de girasol: Amarilla y con mucho olor
- Miel de diente de león: Deliciosa en las comidas
- Miel de romero: Su sabor es más fuerte, pero es buena para el estómago
- Miel de colza: También es de varias flores
- Miel vara de oro: Tiene un color dorado y buen olor
- Miel de bosque: Contiene hierro y es oscura
- Miel de manuka: Viene solo de un árbol de Nueva Zelanda
- Miel azahar: El resultado del trabajo de las abejas y el azahar
- Miel de eucalipto: De las mejores para los virus
- Miel de tomillo: Es oscura, pero deliciosa y con muchas propiedades
- Miel de trébol: Se hace de la flor del trébol
- Miel de alfalfa: Otra miel que aporta mucha energía
Diferentes beneficios de la miel
Ahora te queremos hablar de 10 beneficios de la miel que te aportarán solo cosas buenas a tu vida. Esta sustancia, que viene desde muchas fuertes como pudiste ver, tiene múltiples bondades. Por algo ha sido usada en la medicina natural y sigue presente cuando tenemos resfriados y otros malestares.
Rica en nutrientes naturales
Iniciamos con los nutrientes. No es solo una mezcla dulce que nos regalan las abejas, dentro de la sustancia existen varios componentes que son propios de las flores y plantas. El resultado final de su proceso es muy completo.
Para que conozcas mejor sus nutrientes, 20 gramos de miel natural pueden contener lo siguiente: 64 calorías, vitaminas, minerales, antioxidantes y solo 17 gramos de azúcares simples como la fructosa.
Posee Antioxidantes
Otro de los beneficios y propiedades de la miel es que contiene antioxidantes. Estos son muy positivos para la salud, ya que, ayudan a proteger las células. Mientras más alimentos lo contengan, mejor será para tu organismo.
Por otro lado, entre los antioxidantes presentes pueden estar: flavonoides, ácidos fenólicos, enzimas antioxidantes y compuestos relacionados. Además, todos pueden variar en cantidad dependiendo de los tipos de miel.
Mejor opción que el azúcar
Endulzar diferentes alimentos es algo común, pero no siempre usamos los endulzantes más adecuados. En el caso de la miel natural, llega a ser mucho más beneficiosa que la azúcar blanca, ya que esta segunda puede elevar mucho más los niveles de insulina en sangre.
Según expertos, al sustituir el azúcar por la miel, podrás tener una dieta más equilibrar, mejorar los niveles de insulina y aprovechar los antioxidantes que hemos mencionado. Además, según la que elijas, puede tener el mismo dulzor y hasta ser más deliciosa.
Reduce la presión arterial
Sin duda, la miel natural no puede ser sustituto de un tratamiento de hipertensión. No obstante, gracias a sus antioxidantes y componentes vasodilatadores, es beneficiosa para la presión arterial. Tal cual dijimos antes, es mejor consumirla en vez de azúcar blanca.
Considérala como un ingrediente más dentro de una dieta equilibrada. Si eres hipertenso y quieres endulzar un poco tus comidas, recuerda utilizarla con moderación y podrás aprovechar sus bondades.
Ayuda a reducir el colesterol malo
Otro de los 10 beneficios de la miel es que ayuda a reducir el colesterol malo. Algunos estudios indican que sus antioxidantes son excelentes para el colesterol LDL, algo que también viene relacionado por sus cantidades moderadas de glucosa en sangre.
Asimismo, siempre es importante consumir este tipo de cosas con equilibrio. Depende del tipo de dieta que tengas, es mejor endulzar con la cantidad limite que te ha recomendado tu médico.
Cura quemaduras y heridas
Esto parece milagroso, pero la miel natural lleva siglos siendo usada para tratar quemaduras y diversas heridas. Tiene propiedades antibacterianas, cicatrizantes y antiinflamatorias que pueden ayudar a mejorar todo tipo de daños en la piel.
Para que entiendas como funciona, sus enzimas ayudan a descomponer bacterias dañinas y facilita la regeneración de nuevo tejido. Todo esto sin contar que, gracias a su consistencia espesa y viscosa, protege la piel creando una barrera una vez que la aplicas.
Lo único que debes evitar es aplicarle en heridas muy graves, para esto es mejor consultar al médico.
Reduce la tos
Seguro has escuchado hablar de la miel y los tés con miel cuando tienes resfriados o gripe. La razón es que esta sustancia ayuda con la irritación de la garganta, facilitando la expulsión de flema, humectando para evitar la tos seca y mejorando los síntomas en general.
Se puede usar en niños y adultos, aunque depende de los tipos de miel que prefieras. También se usa solo en una cucharada, o agregando en un té con agua caliente. Además de delicioso, te hará sentir mejor.
Beneficios antidepresivos de la miel
Según estudios, la miel tiene diversos componentes que también pueden beneficiar la parte emocional. No es un elemento milagroso que quitará la depresión, pero si es buena para el sistema nervioso, de hecho, es otro ansiolítico natural que puedes incluir en tu dieta.
Al consumir más miel que azúcar, podrás llevar a tu sistema a mejorar la memoria, tenga mejores horas de sueño y menos ansiedad. Todo esto, junto con otros alimentos parecidos, harán que te sientes más animado.
Mejora la salud intestinal
La miel natural puede contribuir a mejorar la salud intestinal debido a varios factores. Primero, contiene prebióticos naturales, como los oligosacáridos, que sirven como alimento para las bacterias buenas en el intestino, promoviendo así el buen equilibrio de la microbiota intestinal
Por otro lado, las propiedades antibacterianas de la miel pueden ayudar a combatir elementos intestinales dañinos. Esto lleva a tener un sistema intestinal más saludable, siempre y cuando los complementos con otros alimentos sanos.
Gran fuente de energía
Aunque menos dañina que el azúcar blanca, la miel tiene azúcares simples y estos aportan una buena cantidad de energía. La glucosa y fructosa, por ejemplo, son procesadas muy rápido por nuestro intestino, esto se traduce a un impulso de energía instantáneo.
Consúmela cuando necesites endulzar, úsala dentro de tus tés, y pruébala si tienes las defensas bajas. En poco tiempo descubrirás que es un alimento con muchas bondades y que solo trae cosas positivas a tu organismo.